UNAD, la Red de Atención a las Adicciones, ha pedido este jueves que la responsabilidad del juego no recaiga sobre las personas que apuestan y ha instado a reforzar la prevención de este tipo de dinámicas de azar, presenciales u online, ya que tienen aparejadas ciertos riesgos, incluso el desarrollo de una adicción. Así lo han puesto de manifiesto desde la entidad, coincidiendo con el Día Internacional del Juego Responsable, que se celebra cada 17 de febrero.
UNAD ha advertido de la trampa de crear “entornos seguros y responsables” para la práctica del juego ya que, en su opinión, cualquier contexto de apuestas comporta una serie de incentivos que tratan de atraer a la persona hacia una próxima apuesta. Con ello, ha denunciado cualquier estigmatización que pueda construirse en torno a las personas con uso problemático o adicción a este tipo de juegos y ha señalado a las partes implicadas en la oferta del juego como principales responsables de los problemas sociosanitarios y económicos derivados de apostar.
El presidente de UNAD, Luciano Poyato, ha reconocido que la última regulación del juego ha supuesto un avance, pero, en vista de las graves complicaciones que provocan las apuestas, y otros juegos de azar, a nivel sociosanitario y económico a las personas atendidas cada año por esta adicción, ha pedido la eliminación total de los contenidos publicitarios al igual que se estableció con el tabaco y el alcohol.
En este punto, ha recordado que los últimos datos del perfil de personas atendidas con problemas de adicciones sin sustancia en la red UNAD desvelan que hay una consolidación de la tendencia y que el uso de máquinas tragaperras y las apuestas deportivas suponen las principales adicciones presenciales en el caso de los hombres y el bingo y las máquinas tragaperras, en el de las mujeres. Por otro lado, en el ámbito online las apuestas deportivas centran la demanda de atención en ellos y en ellas, el bingo online. Los videojuegos son la segunda adicción más habitual en ambos casos.
“Toda persona es susceptible de convertirse en población vulnerable frente a una conducta potencialmente adictiva, por lo que es absolutamente necesario establecer medidas universales que reduzcan la probabilidad de la adicción”, ha manifestado Poyato.
Por otro lado, la entidad ha pedido al Ministerio de Consumo que apruebe definitivamente la legislación que regula las cajas de botín presentes en los videojuegos para dejar de acercar las dinámicas asociadas al juego a la población más joven. Asimismo, ha instado a las Comunidades Autónomas a ejercer su autoridad frente al juego presencial erradicando la asignación de más licencias de apertura a salas de apuestas especialmente en las zonas más vulnerables, ya sean del entorno urbano o rural.
En este punto, el presidente de UNAD ha subrayado la necesidad de que el Gobierno coordine con las comunidades autónomas la legislación del juego relativa a la población en situación de especial vulnerabilidad, dada la gran normativa existente en la actualidad y los diferentes enfoques de cada territorio. En este sentido, desde UNAD han defendido que habría que llegar a un consenso único para respetar distancias de salones de juego a centros de enseñanza, sociales y sanitarios e incluso entre los propios salones, por ejemplo.
Por ello, el presidente de UNAD ha tendido la mano a los poderes públicos para que cuenten con el tejido asociativo, que es quien conoce las necesidades reales de las personas con adicciones, para trabajar de una manera coordinada con el fin de contribuir al avance y actualización de recomendaciones legislativas más eficaces, dada la evolución del sector y las consecuencias psicosociales y laborales producidas por las apuestas.